viernes, 19 de febrero de 2016

En la BUAP se investiga relación de Lupus Eritematoso Sistémico con vitamina D (MEXICO)

*Estas investigaciones buscan diagnosticar oportunamente y tratar las diferentes comorbilidades, para mejorar la calidad de vida de los pacientes
Contraparte/Staff
.El resultado de estos trabajos se ha publicado en revistas internacionales indizadas
BUAP. 14 de febrero de 2016.- El Lupus Eritematoso Sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune, en la que inciden factores inmunológicos, hormonales y ambientales que pueden dañar piel, articulaciones, riñones y cerebro. Debido a sus múltiples facetas, a menudo el diagnóstico es tardío y la enfermedad avanza de manera considerable. Este mal que afecta principalmente a mujeres que a hombres, en una proporción de 10 a 1, es un trastorno complejo, con retos importantes en investigación.
Mario García Carrasco, académico de la Facultad de Medicina de la BUAP, Premio Estatal de Ciencia y Tecnología, en el Área de la Salud en 2006, desarrolla diversas investigaciones para avanzar en el diagnóstico de diferentes comorbilidades y tratamiento del LES, con el fin de mejorar el control de la enfermedad y ampliar la esperanza de vida.
Entre los trabajos realizados por el también miembro del Sistema Nacional de Investigadores, nivel III, y su equipo de colaboradores, se encuentran los temas: Deficiencia e insuficiencia de la vitamina D en pacientes con LES, Virus del Papiloma Humano y sus diferentes genotipos, y Osteoporosis.
Estas investigaciones se han presentado en foros nacionales e internacionales; además de publicarse en revistas internacionales indizadas con factor de impacto.
Relación entre vitamina D y lupus
Estudios clínicos, epidemiológicos y experimentales muestran el papel potencial de la deficiencia de vitamina D en el desarrollo y perpetuidad de diversas enfermedades autoinmunes como LES, entre otras, porque a las pacientes con este mal se aconseja no exponerse al sol, fuente principal de esta vitamina.
Al interesarse en dicho tema, García Carrasco desarrolló un estudio en107 pacientes con LES, a quienes efectuó una medición basal (T1) y otra más dos años después (T2). A estos pacientes se les prescribió vitamina D3 o incrementó la dosis, de acuerdo con los niveles séricos basales en aquellos con insuficiencia y deficiencia. La relación entre cambios en la concentración sérica de 25-hidroxivitamina D y actividad de la enfermedad fue evaluada por MEX-SLEDAI (índice de la actividad de esta enfermedad).
En los resultados se observó un incremento significativo de los niveles séricos de 25-hidroxivitamina D en los pacientes que tomaron el suplemento de esta vitamina; aunque no se encontró relación significativa entre los niveles séricos de 25-OH D y la actividad de la enfermedad.
Actualmente, el doctor en Enfermedades Autoinmunes por la Universidad de Barcelona, España, continúa trabajando sobre esta línea de investigación, con apoyo para dichos estudios de los Laboratorios Clínicos Ruiz de Puebla.
Prevalencia de genotipos de Virus del Papiloma Humano
En el Departamento de Inmunología y Reumatología, de la Facultad de Medicina, Mario García Carrasco también investiga la prevalencia de genotipos de Virus del Papiloma Humano (VPH) en pacientes con LES, apoyado por el CIBIOR-HGR 36, IMSS Puebla.
De mayo de 2014 a enero de 2015 se efectuó un estudio a 102 mujeres con LES, para analizar genotipos de alto y bajo riesgo, coinfecciones e ingesta de inmunosupresores. Además, se les aplicó una encuesta con antecedentes generales y gineco-obstétricos, exploración física y ginecológica completa y tomaron muestras del cérvix uterino para la determinación del VPH.
En estos pacientes se identificaron los genotipos 16, 18, 33, 53, 55, 56 y 59 como de alto riesgo y 6, de bajo riesgo; siendo el 53 y el 16 los que se encontraron con mayor frecuencia en mujeres con VPH y LES (27.7 y 33.3 por ciento, respectivamente).
Entre las conclusiones se obtuvo que la prevalencia del VPH cervical en pacientes con LES fue del 17.6 por ciento y de coinfecciones de VPH en este tipo de pacientes, del 3.9 por ciento. El genotipo más común en el estudio fue el 16, notificó García Carrasco.
La relevancia de dicho trabajo es que las pacientes fueron valoradas por el Departamento de Gineco-Obstetricia y al observarse lesiones fueron tratadas de acuerdo con los protocolos de área, evitando así complicaciones y la evolución a cáncer cervicouterino.

LEE MAS DE ESTE ARTICULO ---> AQUI

No hay comentarios:

Publicar un comentario